viernes, 27 de abril de 2012

La subida del IVA

           Era una medida esperada para los que nos interesamos por estos temas, puesto que con la caída del consumo derivada de la crisis pero casi más de la brutal austeridad implantada (que hace que la gente reduzca su consumo y los ingresos estatales bajen) y la fijación de unos objetivos de déficit tan rígidos hacían inevitable que se aumentase el IVA para recaudar más. Voy a analizar lo que me parece interesante o sobre lo que puedo aportar algo, obviando todo el tema de las incongruencias políticas, ya que fue una medida criticada y negada durante mucho tiempo, eso ya para cada uno.

¿Por qué ha sido el IVA y no otro impuesto? Pues las razones para esto son principalmente dos:
El IVA es un impuesto indirecto que grava el consumo final de bienes y servicios que por sus características genera menos distorsiones en el mercado (todo impuesto, excepto el de suma fija genera una mayor o menor distorsión, teoría impositiva básica). Desde el lado de la eficiencia es uno de los impuestos recomendables, luego hablaremos de cuestiones de equidad.
La otra razón es que ciertamente, el tipo impositivo del IVA en España es menor que el del resto de Europa, por tanto existía un margen de maniobra, pero en este punto hay que recordar que la presión impositiva directa también es menor, el salario medio también y un largo etc.

Bien, volviendo a la equidad, está claro que subir el IVA resta progresividad puesto que el aumento afecta por igual a todo el mundo que consuma esos bienes y servicios (claro está que si tengo 5 coches he pagado más IVA que el que tiene uno, pero a la hora de comprarlo soportamos el mismo impuesto). Así que sí es verdad que serán los que más consuman los que paguen más, pero lo verdaderamente dramático es que habrá personas que uniendo la subida del IVA a la de la luz, gas, repago sanitario, subida de tasas y demás, pues no pueda acceder a un consumo mínimo que le reporte una mínima calidad de vida.

¿Por qué la medida es para 2013 y no ahora? Bueno esto se podría decir que es una “trampa”. En realidad el efecto de la medida es doble, el de la subida en sí y otro efecto va a ser que el consumo antes del 2013 va a aumentar, puesto que consumir hoy es más barato que hacerlo el año que viene. Se podría esperar que en lo que queda de año haya un repunte en el gasto que active un poco la actividad, aunque con tanto recorte previo este efecto seguramente sea pequeño.

Mi opinión es que esta medida nos llevará a ahogar más a las familias, como siempre a las clases medias y bajas, que ven como tras una serie de recortes laborales, sanitarios, educativos, además van a tener menos dinero disponible para gastar, pero no gastar entendido como consumo superfluo, si no para gastar en bienes y servicios necesarios. Esta medida si no viene apoyada por estímulos al crecimiento económico, va a ahogar más a la gente y será inefectiva para reducir el déficit ya que aunque el estado ingrese más por el consumo, si no hay consumo al no haber renta disponible pues… Parece que ya se atisba algún cambio a nivel europeo, en el que parece que con austeridad solo no basta (como siempre en España nos cogerá con el pie cambiado) y parece que hay que tomar medidas que impulsen en crecimiento.

Si alguno me sigue asiduamente, quizá haya visto que en entradas anteriores si que estaba a favor de subir los impuestos y ahora se sorprenda. Bien, es verdad que soy favorable a una subida de impuestos que además de ser necesaria, como hemos dicho antes teníamos margen para realizarla, pero para mi esa subida no pasaba por el IVA, o si, pero con matices. La subida de impuestos tenía que empezar por un refuerzo de la progresividad en la imposición directa, una lucha contra el fraude y contra la fuga al exterior de capitales, tal vez una subida del IVA también, pero en un contexto en el que no se hubiera producido ningún recorte social y unido a medidas de estímulo e inversión que volvieran a colocarnos en una senda de crecimiento. En próxima entradas trataré alguna de esas medidas que se pueden tomar.

jueves, 26 de abril de 2012

Un cambio radical


Ayer, como sabréis algunos por twitter, asistí a la presentación del nuevo trabajo de una joven creativa audiovisual, “Ollo de vidro” en la que participan algunos amigos. Como siempre son las cosas cotidianas las que más me hacen reflexionar.

Es admirable que en un tiempo en que parece que todos hablamos de bancos, rescates financieros o crisis y parece que no existe nada más, unos “idealistas” dediquen su tiempo a realizar un cortometraje documental sobre temas que parece que no importan en estos días, seguro que alguien les habrá dicho: pero no veis como están las cosas, esos temas no interesan, son prescindibles en estos tiempos. Pues bien, niego totalmente esa sentencia y no por volverme loco o compartir su idealismo, si no que tenemos poderosos argumentos económicos a nuestro favor. Invirtiendo y solamente participando de esa economía especulativa y contaminante, la que nos dicen que es la economía productiva, prestando nuestros ahorros a empresas grandes, que suelen ser contaminantes o que simplemente sus intereses son los contrarios a los nuestros como consumidores, esa empresas que son las que esperamos que nos saquen de la crisis mirando todos los días la tendencia del IBEX35. ¿Qué interés tiene? ¿Cuántos somos accionistas de esas empresas? Inditex hace 20 años no existía en ese índice por ejemplo. Y eso es la idea que quiero que quede, lo viejo, lo que nos ha traído hasta aquí, no nos va a sacar le la crisis.

Las empresas y no sólo empresas que nos van a hacer salir son algo nuevo y distinto y para mi tiene que ir unido a un cambio radical en la mentalidad de los consumidores. Tenemos que usar mejor el poder que tenemos cuando decidimos consumir un producto o servicio o no el otro. En este punto recuerdo mucho mi entrada anterior llamada Elecciones todos los días. Nosotros podemos elegir si apoyamos a gente que quiere crear cultura e entretenimiento además siendo nuestros vecinos, o preferimos pagarle a bodrios extranjeros, o saliendo del mundo audiovisual ¿por qué somos capaces de pagar más por usar esta o aquella marca solo por publicidad y no somos capaces de favorecer productos ecológicos, culturales o simplemente nuevos que intentan hacer cambiar las cosas? Muchas veces, hacer acorde nuestro consumo a nuestras ideas, a lo que queremos del mundo, sería suficiente. Solo tenemos que “premiar” con nuestro gasto a las empresas que nos tienen que guiar en un futuro, empresas de energías renovables, gente que cree cultura, que nos den servicios que cubran nuestras necesidades reales  no esas que se empeñan en despertarnos, consumo ecológico, etc. Si seguimos alimentando la parte podrida que nos ha llevado a esta situación, no conseguiremos ningún cambio, nos adaptaremos durante un tiempo, saldremos de a crisis claro está, pero volveremos a tener una sociedad podrida abocada a otro fracaso futuro en el que nos tendremos que volver a preguntar que hicimos mal.

Para acabar, pedir perdón por haber usado el término “idealista” en realidad a eso no me gana nadie. Mucho ánimo y seguid con vuestro trabajo. Aquí os dejo un trabajo anterior de “Ollo de vidro”: “Camiño da memoria”.

jueves, 19 de abril de 2012

Repsol YPF


Uno de los temas de estos días está siendo la nacionalización de YPF por parte del estado argentino. Aparte de lo que han contado los medios (intentad ver no solo los españoles y argentinos por favor) me gustaría reflexionar sobre un tema que para mi es la causa principal de este problema y por el que estamos pasando de puntillas. Mi idea no es contar mi opinión sobre la nacionalización, que aparte de corta sería irrelevante, si no plantear algunas preguntas interesantes.

Vamos a hablar de los derechos de propiedad. Uno de los pilares del capitalismo (hablando de otro sistema, por ejemplo socialista no tendría sentido hablar de este concepto) es la existencia de la propiedad privada  y un estado que se encarga de protegerla. Este sistema propone (simplificando mucho) que si eres el dueño de, por ejemplo,  una parcela invertirás en ella para así sacarle un rendimiento, mientras que si por el contrario es de propiedad común, no te esforzarás en cultivarla, puesto que otro que no la cultive al final se aprovechará de tu trabajo. Así podemos observar todo lo desaprovechado y en qué mala situación están los montes comunales gallegos.

Por tanto, entendiendo el concepto de propiedad, vamos a aplicarlo. Esto es fácil en unos casos: una casa, un terreno, un ordenador… pero puede ser extremadamente difícil en otros: el aire ¿pertenece a alguien? ¿Y el mar? Nadie se había planteado de quien era el aire hasta que ahora hay gente que saca rendimientos de él, destrozando la frase popular de “vivir del aire”. Pero claro, ahora hay quien contamina el aire y empeora nuestra calidad de vida, o saca un rendimiento económico de él. A donde pretendo llegar es que, así como se debate ahora la “propiedad del aire” para solucionar los problemas de la contaminación (si nos pertenece a los ciudadanos quien contamine deberá pagarnos por ello y así hasta que sea tan caro como para que inviertan en dejar de contaminar) en su momento también se planteó el debate de a quién pertenecen los recursos del subsuelo.

Parece obvio que el subsuelo no es algo tan fácil de adjudicar como un simple coche. Un ejemplo: tengo un terreno en la ladera de una montaña, el más cercano al valle y por encima existen otros dos terrenos de propietarios distintos, por los tres discurre un riachuelo subterráneo que yo aprovecho para extraer agua y regar mi terreno. El del terreno superior hace lo mismo, y el de más arriba también. El resultado final es que el del terreno superior tendrá una finca explotable y los otros dos un terreno sin ninguna utilidad, simplemente por la ubicación, perdiendo todo el valor que tenía antes. Así que el agua, los recursos naturales y demás, no es tan simple decir que pertenecen a una u otra empresa. Parece lógico que sea el estado al que pertenecen esos recursos, que gestione su explotación, puede cedérsela a una empresa privada a cambio de una contraprestación o puede intentar explotarlo por sus propios métodos y que el beneficio de un recurso propio recarga en la propia población y no en los inversores de una empresa privada y a lo mejor extranjera.

Ya para terminar un par de reflexiones: me parece bastante chocante la implicación de todos los medios y la población en España para defender a una empresa privada cuyos accionistas son un centenar o millar de personas, como si ellas estuvieran muy preocupadas de los 5 millones de parados españoles, me parece absurdo el ataque hacia la población argentina (acaso nosotros somos responsables de todas las actuaciones de nuestros dirigentes) y otra pregunta al aire ¿recordais la reacción que hubo en España cuando una empresa extranjera europea hizo una OPA contra una gran empresa eléctrica española? Parecía que todo el mundo estaba de acuerdo en que las grandes empresas estratégicas deberían ser de propiedad española, pues ahora no nos quejemos de que un país quiera que su recurso más preciado sea explotado por sus propios medios.

Parece que en España estamos más acostumbrados a nacionalizar pérdidas (bancos ruinosos) a admitir que otros puedan nacionalizar sus recursos.

miércoles, 11 de abril de 2012

Carta al Ministro de Economía


Querido Sr De Guindos:

He querido dejar unos días hasta comentar su actuación, eso de los 100 días que se dice, para hablar con algo más de conocimiento.

Quiero comentar alguna de sus últimas medidas, que vistas desde la distancia podrían parecer un “giro socialista” pero ni mucho menos. Hace unos días nos ha dicho que a lo mejor no tenemos que proveer de servicios médicos a aquellas personas que ganen, por ejemplo, más de 100.000 euros anuales. Bien, pues hasta donde sabemos todos, estos servicios sanitarios se financian con impuestos y cotizaciones sociales que son progresivos (sin entrar a discutir el grado de esa progresividad), por tanto se supone que una persona con esos ingresos que cumpla con sus obligaciones tributarias (esto es básico) ya está contribuyendo y en mayor medida, al pago de sus servicios sanitarios. Por otro lado las estadísticas nos dicen que ese requisito lo cumple un porcentaje tan pequeño de la población que su efecto sería muy reducido.

En realidad, es chocante la idea de hace “repagar” a la misma persona y que no se planteé la solución de adaptar el sistema fiscal y de cotizaciones para recaudar lo suficiente y de una manera justa (más progresiva) para financiar la sanidad o en su momento la educación. Además hay margen para ello, la presión fiscal española está unos 4 puntos por debajo de la media europea y el fraude está al orden del día. El diseño de un mejor sistema fiscal y una mayor lucha contra el fraude (conseguir que paguen todos y todo lo que se tiene que pagar) serían la solución para conseguir la financiación de estos servicios básicos sin generar grandes distorsiones ni perjuicios a la economía y la población.

No quiero terminar sin mencionar su intervención de ayer en la que venía a decirnos que debemos olvidarnos de lo que dicen los mercados a corto plazo. Sin querer corregirlo, porque es sabido que los mercados a corto plazo son muy inestables y pueden estar respondiendo a estímulos distintos a los de la economía real, decirle que suena un poco mal que lo diga usted, puesto que la campaña electoral de su partido se basaba en contarle a los españoles que la prima de riesgo subía, el IBEX bajaba y demás, sin contarnos esto mismo, que a corto plazo son datos muy volátiles. Decía lo del “giro socialista” al principio porque en realidad puede quedar la idea de que usted no se fija en los mercados y que quiere hacerle pagar a los que más tienen, pero es algo ficticio, solo tenemos que observar los medios alemanes a los que le hace declaraciones.

En fin, para no aburrir ya me despido, pero creo que esta será una de muchas epístolas futuras, espero que en alguna de ellas haya que darle la enhorabuena, un bueno comienzo sería darnos trabajo a los jóvenes.

Un económico y recortado saludo.

martes, 10 de abril de 2012

"Simiocracia"

     Después de bastante tiempo, he dado un pequeño cambio y vuelvo a publicar. Aunque los que me seguís en facebook y twitter veis que nunca paro de subir noticias o textos sobre el tema. La excusa para hoy es la de un vídeo que he visto y me ha impresionado bastante, tenia pensado empezar con una carta al ministro Luis de Guindos pero esa será mi próxima actualización. Ahora os dejo el vídeo en el que explica la crisis actual tan bien que no tengo mucho más que decir.
    Este vídeo de Aleix Saló es la continuación de otro anterior que llevaba por nombre "Españistán" y que tambien obtuvo mucha repercusión.