miércoles, 24 de abril de 2013

All we need is growth


Pues sí, en ello estamos y parece que por fin los que llevamos años diciendo que la única manera de salir de esta era incentivar el crecimiento empezamos a tener repercusión, viendo que Durao Barroso, presidente de la comisión europea reconoce que la política de austeridad está fallando.
Hoy viendo el telediario nos han vendido perfectamente la idea de que todo va bien porque la prima de riesgo está en 300 puntos, pues bien, ni ahora está bien ni cuando estaba en 530 era el apocalipsis. ¿Qué es la prima de riesgo? Pues el diferencial del tipo de interés del bono alemán a diez años respecto al de otro país, en este caso España. La prima de riesgo ha bajado, ¿por qué? Entre otras: representa el miedo a una recesión que parece evidente en Alemania y además el BCE mostró su apoyo a los bonos españoles y los inversores extranjeros tienen liquidez debido que a que sus bancos centrales sí están trabajando en materia expansiva. Es decir, la prima cae porque se deteriora la componente alemana no porque mejore la componente propia al estado español. La realidad es que el gobierno ha tenido que rectificar su previsión de caída del PIB y multiplicarla por tres, lo que provocará un aumento del paro, con la consiguiente caída de recaudación de impuestos y el aumento en el gasto de prestaciones de desempleo. Esto se traduce en un agujero en el presupuesto que se cifra en torno a 10.000 millones, lo cual va a provocar que el gobierno tenga que llevar a cabo más recortes (cosa que nos ha dicho que no iba a hacer). Haciendo más recortes va a provocar una contracción en el consumo que provoca que las expectativas de crecimiento para el año que viene que tiene el gobierno se vayan a quedar en papel mojado. Esto es lo que dicen los libros de economía, mientras tanto el político Montoro sigue cuan telepredicador por las televisiones y desayunos informativos.
Convenido que lo que hace falta es crecimiento, ¿cómo lo conseguimos? Bien, pues a corto plazo las medidas para generar crecimiento son:
Una devaluación del tipo de cambio: esta decisión pertenece al BCE y en este momento está realizando una muy errada política, está permitiendo un tipo de cambio del euro sobrevaluado, colocándose en 1,30$/€
Política monetaria expansiva: también pertenece al BCE (por ello he dicho siempre que el papel clave pertenece a este organismo). Tenemos el Banco Central que influenciado por Alemania y su pavor a la hiperinflación de los años 20, menos practica la política monetaria expansiva. Mientras en Japón y la Reserva Federal Americana inundan el mercado con moneda, el Banco de Inglaterra financia el déficit público de Reino Unido, pues el BCE mantiene su política excesivamente cauta.
Política fiscal expansiva: la política fiscal sí depende del estado español, pero en lugar de fomentar el crecimiento se está llevando a cabo una política restrictiva, con recortes que solo hacen que los consumidores reduzcan su consumo y así deprimir la economía. Aún siendo política responsabilidad del gobierno, cabe tener en cuenta que viene condicionada por la presión por las instituciones europeas en el control del déficit.
Crecimiento vía exportaciones: esto significaría compensar con ventas al exterior toda la caída de la demanda interna. En el contexto actual es sumamente difícil puesto que al tener el tipo de cambio tan elevado los productos pierden competitividad en el exterior. Además los principales clientes de nuestros productos son socios europeos como Alemania, Francia o Portugal que se encuentran inmersos también en políticas de austeridad. Excluyendo de la balanza las exportaciones a Oriente Medio que vienen favorecidas por la concesión del Ave a La Meca, las exportaciones españolas están estancadas.
Este es el verdadero resumen de la situación actual, que no pinta un futuro muy prometedor mientras no se tomen medidas de carácter expansivo y la que a mí me parece clamorosa es la terquedad del BCE sobre el tipo de cambio. El tener una moneda fuerte en este caso no es síntoma de salud económica, necesitamos un tipo de cambio que haga competitivo nuestros productos hacia el exterior y quizá sea el momento de que se den cuenta, si esto es así invertir a una caída del euro podría ser una inversión muy interesante para alguien que pueda invertir unos ahorrillos que no necesite, si tiene esa suerte.

jueves, 11 de abril de 2013

Aeropuertos gallegos y… ¿eficientes?


Esta entrada surge de unos comentarios vistos en twitter a raíz de una campaña llamada a reclamar una solución para el Aeropuerto de Vigo, salvemos peinador o algo así. Para empezar tengo que decir que seguramente me caigan unos cuantos palos a la hora de escribir esto, puesto que soy de Vigo, pero tengo que ser fiel a la Economía.

En un principio la idea era contestar a algunos tuits, puesto que me llamó soberanamente la atención que algunos de los comentarios los escribían personas que conozco (y seguro que de los que no conozco también) y que han utilizado el aeropuerto de Sá Carneiro (Oporto) para viajar. No mucho menos criticar que se utilice esta opción, ya que la economía, como decía mi profesor de Micro III, es escoger la opción que más me satisface dentro de las opciones existentes y que me puedo permitir. Haber respondido a esos tuits hubiera dejado cosas en el aire, por eso hago esta pequeña reflexión, que a mi modo de ver es la pregunta correcta: ¿es eficiente la existencia del Aeropuerto de Vigo-Peinador? Y para responder quiero ir aún más allá ¿Son eficientes 3 aeropuertos en Galicia?

Galicia es una comunidad autónoma que tiene unos 2.700.000 habitantes (INE 2011) dónde la mayor parte de la población se concentra en la franja más cercana a la costa que va desde Ferrol hasta Vigo. Pues bien, en esta franja se encuentran los 3 aeropuertos gallegos.

 De norte a sur, el primero que encontramos es el Aeropuerto de Alvedro en las proximidades de A Coruña y quizá el que para mí es el caso más llamativo ¿por qué? Puesto que es un aeropuerto pequeño situado a 50 km de distancia del Aeropuerto Internacional de Santiago de Compostela (Lavacolla). Nunca he estado en él, pero por lo que tengo oído presenta las instalaciones más deficientes dentro de los 3 aeropuertos gallegos. Ahora bien, hace 50 años tal vez esos 50 km significaban un gran obstáculo que justificase la construcción de otro aeropuerto (que no lo creo) pero tengo clarísimo que a día de hoy nadie sensato construiría un aeropuerto a 50 km de otro conectado por autopista (lo que se traduce en un viaje de 30 minutos). ¿No puede dar servicio el aeropuerto de Lavacolla a la ciudad de A Coruña cuando además el tráfico de este es más bien pequeño? Yo estoy seguro de que sí y más adelante aún daré más razones. Para mí está claro, cierre de Alvedro ya, que es uno de los aeropuertos que da pérdidas dentro de la red de AENA.

Ahora nos volvemos a preguntar, ¿son eficientes dos aeropuertos en Galicia? Pues aquí tiro de gallego y digo, depende. La lógica dictaría que en este caso uno se situase cerca de A Coruña y otro cerca de Vigo, si con esta idea se hubiese diseñado el plan aeroportuario en Galicia podría ser, absorbiendo entre ambos el tráfico que tiene el Aeropuerto de Santiago de Compostela, pero por causas que ahora no vienen al caso (o sí pero me extendería mucho) al Aeropuerto de Santiago se le dio gran impulso y es el de mayor tráfico e infraestructuras, así que la lógica dicta no tocarlo. (NOTA: Lavacolla también presenta pérdidas al año 2011 pero debido a su mayor tráfico el % que representa es pequeño).

Entonces pasamos a hablar del Aeropuerto de Vigo, el que inició en mi pensamiento todo esto. Para empezar un poco de situación e información para los que no sois de aquí. Vigo se encuentra a una distancia de unos 95 km del Aeropuerto de Santiago de Compostela y a unos 150 km del Aeropuerto Sá Carneiro en Oporto. Como es sabido en la ciudad, ambos aeropuertos son muy usados por los habitantes de Vigo y alrededores por su mayor variedad de destinos y por la existencia de aerolíneas de bajo coste en estos dos aeropuertos. En cuanto a infraestructuras el aeropuerto de Vigo está mejor que el de Alvedro, siendo el tráfico de pasajeros similar a este, aunque con más del doble de tráfico de mercancías en el aeropuerto vigués.

Como veréis en esta entrada estoy obviando el claro desequilibrio que se producen en las subvenciones que reciben los aeropuertos, fácilmente comprobable el desequilibrio en favor de los aeropuertos del norte de la comunidad. Pero el objetivo de este post es ver si son eficientes sin depender de esas subvenciones que como veremos al final, podrían ser mucho mejor invertidas en mi opinión.

Aún sin estar todo lo bien comunicados que podrían estar los aeropuertos de Oporto y Santiago con Vigo, son muy utilizados por los vigueses, lo cual muestra la clara desventaja competitiva de este, ahondando además en la idea de que las distancias son menores problemas ahora que antes (idea que parece que los políticos no interiorizan y parece que usan fórmulas del siglo pasado). En este punto querría introducir un par de ejemplos:
·         El Aeropuerto de Frankfurt Hahn que utilizan las Low Cost, se encuentra a 126 Km del núcleo de población de Frankfurt.
·           El Aeropuerto de Shanghái se encuentra a 47 km de la ciudad y está conectada a ella por un tren que realiza el trayecto en 8 minutos.

Llegado a este punto es cuando me tiran huevos por la calle, ya que afirmo que el Aeropuerto de Vigo, que también da pérdidas dentro de la red AENA, debería ser cerrado. Existe una salvedad que estoy dispuesto a discutir y a escuchar ya que no dispongo de todos los datos que me gustaría, de que podría ser conveniente mantenerlo para el tráfico de mercancías, ya que la zona de Vigo es industrial y podría ser necesario, pero aun así me inclino a pensar que lo mejor es el cierre. Que terreno más “cuco” quedaría ahí para la construcción de IKEA y el famoso Porto Cabral, sin tener que talar más bosque.

Bien, en resumen, hemos cerrado dos aeropuertos y además nos ahorramos los millones en subvenciones que se están dando para competir entre ellos, ya que al haber sólo uno no son necesarias. Esto por si solo sería razón suficiente para llevarlo a cabo aunque se tradujese en una disminución del bienestar de algunos usuarios para viajar y hacer uso del aeropuerto, pero me gustaría ir más allá y asegurar que con un aeropuerto, ahorrando el dinero que hemos acordado que se ahorraría y realizando una inversión (digo una en contraposición a las subvenciones permanentes que son el modus operandi actual) podríamos tener un sistema de transportes mucho mejor para todos los usuarios. Es decir, en mi opinión existe una forma de organizar el transporte para que todos tengamos más bienestar y aun coste global menor.

Como bien pudo adivinar algún curioso lector, para mí la solución pasa por el Ave. Además es el momento ideal, puesto que la construcción de la línea se está realizando ahora, pero me da que nuestros políticos con mentalidad del siglo pasado van a dejar pasar la ocasión. Sin llegar al extremo del caso de Shanghái, que me importa a mí que mi ciudad tenga aeropuerto o no, si cogiendo un tren en el centro, tengo un medio de transporte que en 30-40 minutos me pone en la terminal de un aeropuerto internacional con múltiples conexiones y mayor oferta que si existe mi aeropuerto local. Esto era algo que hace 60 años no podían plantear, pero hoy está claro que es el futuro con los medios que disponemos. Esto además se podría ver complementado con la opción de poder facturar en la estación de tren ya en Vigo (al estilo del metro de Madrid) pasando el tiempo post facturación de viaje al aeropuerto en vez de paseando por él sin nada que hacer. Además la existencia y apuesta clara por un aeropuerto y no por tres, conseguiría hacer crecer este, con nuevas líneas, conexiones e incluso una inversión para mejorar instalaciones. Conseguiríamos así el aeropuerto mejor  dotado de todo el noroeste peninsular, siendo el más importante al norte de la línea trazada entre Oporto y Madrid y al oeste de la línea Madrid-Bilbao, conectado a todas las ciudades importantes de Galicia por tren de alta velocidad o carretera, a una distancia como máximo de una hora (para no ser excesivamente optimistas). Esto es así y lo único que hay que hacer es hacer llegar la vía del Ave al Aeropuerto de Santiago, tal vez haciendo pasar por ahí la línea Santiago-Coruña o, como esto no se ha planificado ya, construir un ramal desde la estación de tren en Santiago al aeropuerto en el que la gente se bajase del Ave y cambiase a un tren que uniese continuamente la estación con el aeropuerto. Claramente yo soy partidario de la primera opción. Esto que a mí me parece obvio, a los portugueses se lo pareció también y en el diseño de la línea Oporto-Vigo de Ave, la hacen pasar por el Aeropuerto Sá Carneiro. Si esto se llega a realizar (el proyecto quedó paralizado con la crisis y rescate de Portugal) podemos decir adiós igualmente al aeropuerto de Vigo, invirtamos lo que invirtamos en él, pudiéndose convertir en otra tumba de dinero como la famosa Ciudad de la Cultura.

                 De forma análoga a los pasajeros, la existencia de trenes que conectasen las mercancías de forma rápida y poco costosa (una vez realizada la inversión inicial los costes de transporte serían muy bajos) con un punto logístico como podría ser Guixar en Vigo solucionaría el déficit de no tener el aeropuerto en Vigo para las mercancías.

                Es una lástima, pero me temo que todo esto quedará en papel mojado por múltiples razones, una de ellas y la más estúpida es el localismo/rivalidad de A Coruña y Vigo (del que a veces soy partícipe también). Ninguno de los dos van a querer “perder” (aunque creo q está claro que no perderían) frente a la otra y las dos pelearán por conservar sus aeropuertos ineficientes. Además ya se ha perdido la oportunidad de diseñar la línea de alta velocidad teniendo en cuenta esto (y las necesarias conexiones de cercanías) y no se ha hecho. No los veo rectificando. Si alguien quiere recogerlo, esto es una llamada a los partidos políticos, les regalo la idea, promuevan un estudio (que me encantaría participar en él) que demuestre con datos esto que el sentido común afirma y preséntese a las elecciones haciendo POLÍTICA de verdad y no el tan odiado “y tú más”.

                Podría seguir hablando de todo esto pero creo que lo importante está dicho y si no lo demás me lo sacareis con comentarios. A mis lectores no gallegos les pido disculpas por escoger un tema tan local, pero seguro que sería extrapolable a otros ejemplos. 

martes, 2 de abril de 2013

El Whatsapp de un economista


En este tiempo de cientos de modos de comunicación, instantáneos muchos de ellos, la preocupación porque Whatsapp anuncie que sus cuentas pasarán a ser de pago ha generado bastante revuelo. Seguro que todos conocéis y tenéis esta app así que es inútil explicarlo, vamos al tema del dinero que es lo que aquí interesa.

Este caso me recuerda a varias lecturas hechas sobre la construcción del ferrocarril y de las líneas telefónicas del teléfono fijo tradicional ¿por qué? Pues porque en estos casos como en el de Whatsapp, la creación de una red es clave.

A diferencia del tren o el cable telefónico que tardaron mucho tiempo e inversión en construir su red, el caso de la aplicación podemos decir que fue casi instantáneo, en muy poco tiempo todo el mundo disponía de ella en su móvil y pocos eran los contactos que no poseían este nuevo invento de comunicación. Ahora cuando Whatsapp alcanza un número inmenso de usuarios quiere empezar a cobrar por su uso, es decir, se hizo casi indispensable para todo el mundo siendo gratuita y ahora quieren cobrar un precio por ella (algunos temen que ese sea un paso que también tome Google en algún momento). Cabe señalar que el precio que el precio es más que asumible para la cantidad de mensajes que te ahorras y también existen otras aplicaciones “sustitutivas” como pueden ser Line, Viber… que continúan siendo gratuitas, pero yo voy más allá y la economía nos enseña cómo mantener el mismo Whatsapp y gratuito.

Aquí es dónde radica la importancia de que exista una red. El usuario está dispuesto a pagar por una app con la que se puede comunicar con sus contactos, pero seguro que no va a pagar si sólo el 10% de los contactos. Volviendo al ejemplo del cable telefónico, era bastante absurdo tener teléfono fijo cuando no había nadie a quien llamar, por tanto su uso no se generalizó hasta que consiguió una red lo suficientemente amplia para atraer a los usuarios. Así que si cuando nos quieren cobrar el Whatsapp no aceptamos, es más que probable que con el paso del tiempo nos vuelvan a activar la cuenta, puesto que si varios contactos desaparecemos de la aplicación, nadie querrá pagarla porque no tendrá interés en ella, y así sucesivamente, así que os animo a todos a que cuando os venzan vuestras subscripciones, no paguéis nada y cuando Whatsapp se dé cuenta de que se queda sin su red de contactos (su activo más valioso) pensará en otras formas de ganar dinero (venta de emoticonos, publicidad, etc) pero tendrá que dejar el servicio básico gratuito.

Este es un caso dónde el poder del consumidor (de un consumidor informado) es muy grande frente al producto, pero no es el único, y si cuando compramos nuestra cesta de la compra fuésemos consumidores más “racionales” tendríamos mucho más poder para evitar abusos por parte de marcas y demás.